lunes, 31 de octubre de 2011

Observadora.

Caer en llamas
mientras observas.
Caer profundo,
en un mar negro,
Mientras observas
a lo lejos
con una sonrisa en la cara
con unas zapatillas en las manos
con un pañuelo bajo tus pies
descalzos.
Como si bajo tuyo
nacieran cerros de campo verde
mientras observas
detenida y sicoticamente.

Caer calcinada
en emociones destruidas
mientras observas
a lo lejos.
Con los ojos brillantes
como con inspiración de tal proeza
de muerte fortuita
de arcoiris desfasados
sin belleza.
Caer arrimada
como feto en huelga
haciendo sentir dolores
a ese vientre infertil de promesas
de sueños a cumplir,
de encuentros...

Caer llorando con una despedida
en el pecho,
en la mente,
en los sueños...
de esas que se repiten todos los dias
en donde piensas que en vez de decir
Adios
hubieses preferido decir
Hasta Luego,
Hasta siempre.
Caer en un "nos veremos otra vez"
eterno
mientras ries, despiadada
con los ojos brillantes,
con zapatillas en las manos
y un pañuelo bajo tus pies
descalzos.

Preparada para saltar
desde esos campos verdes,
mientras esperas a que toque piso
para caer de pie,
para volar con esas alas
que, estando rotas yo arreglé.

Me quitaste las alas,
despiadadamente
con una sonrisa en la cara,
con unas zapatillas en las manos
que no te pones para recorrer camino,
con un pañuelo sucio bajo tus pies
descalzos...

Toco suelo
entre lágrimas de pánico
te veo llegar a mi lado,
en el temeroso reencuentro
a años luz de la caída..
Perdida, sin aliento
en huelga de sentimientos
me retiro, indignada
por culpa de reencuentros.

Caer en llamas
mientras observas.
Caer profundo,
en un mar negro,
Mientras observas
a lo lejos...




Por si fuera la música que regresa, prepárate.